Publicado el 28-08-2013
Texto: José Aureliano Buendía
Fotografías: Mauricio Echegoyen
Ocho días han transcurrido
desde que la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE)
cercara la cámara de diputados a causa del madruguete legislativo para imponer
las leyes secundarias que reglamentan los cambios constitucionales de los
artículos 3º y 73 de la tan mentada Reforma
Educativa. Desde aquella madrugada del 20 de agosto, los contingentes de
profesores democráticos han arribado a la Ciudad de México para librar la
última batalla por el respeto a sus derechos laborales y por la educación
pública de todos los mexicanos. Las principales calles de la ciudad se han
inundado de voces que reclaman ser escuchadas, miles de personas dan muestra de
que el supuesto consenso nacional –Pacto
por México- es una farsa que no representa a nadie. A las voces de los
profesores se van sumando otras muchas que se oponen al nuevo embate
neoliberal, a las reformas en donde el bienestar de muchos se sacrifica para
hinchar los bolsillos de unos pocos.
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