VIENTO DE LIBERTAD:
Jornadas Mina–Fray Servando en Navarra.
Mari
Jose
Comité de Otano
Comité de Otano
Gonbidapena
Casa
de Todas y Todos
22
junio, 2017
Les compartimos un texto que
nos ha enviado la compañera Mari Jose, a nombre del Comité de Otano, así como
el programa de actividades que se realizarán en el marco de las jornadas en
honor a Xavier Mina en Navarra, donde un representante de la Casa de Todas y
Todos hará entrega de una placa cerámica para honrar la memoria del héroe
navarro.
XAVIER MINA: Nafarroa
1789-México 1817
Fusilado por el ejército español el 11 de noviembre de 1817.
Cuando desembarcó Xavier Mina en la costa tamaulipeca
de Soto la Marina, y en unos meses se internó en aquella tierra extraña e
infinita semejante a una Nueva Ítaca lunar, tal vez podría haber pensado con
Pedro Páramo, que qué fácil era morirse allí, o qué fácil era vivir estando
muerto, o qué difícil en cambio, le resultaba vivir para morir. Dilemas de un
sueño imposible que descifraba el fatal destino de un hombre joven, indefenso,
cuya mayor heroicidad fue su firmeza y tesón emancipador para vivir y morir por
una causa digna, la libertad.
Y no la suya ni la de unos
pocos precisamente, la libertad de todos, porque así se estaban forjando las
naciones de la Patria Grande, de norte a sur, de sur a norte, como una marea
viva de dos océanos que colisionan y se levantan hasta cubrir toda la tierra,
fecundo diluvio universal. La libertad era la patria y la patria era la
libertad.
Se llamó México aquella
Nueva Ítaca libertaria que surgió de la tierra anegada en sangre, alzando el
vuelo del águila y la serpiente, como serpiente emplumada resurgiendo de las
cenizas de una viejo virreinato español tiránico y tiranizado que, entre
estertores y agonías moría definitivamente, mientras renacían, también
definitivamente, los desaparecidos Xavier Mina y Pedro Moreno, como aparecidos
de la memoria colectiva e identitaria que con grito de dolores de parto
proclamaban la independencia definitiva. No hubo llanto de plañideras que
rumiaran al viejuno y Real difunto colonial, sólo fiesta, música, algarabía y
bendiciones por el natalicio patrio.
Han pasado doscientos años
del fusilamiento por la espalda de Xavier Mina por el ejército español un 11 de
noviembre de 1817 en el cerro del Borrego, y quién sabe si será ahora cuando se
cumpla su sueño estratégico y los vientos del oeste nos regalen al oído el eco
de libertad vencedor de la tiranía, sembrando patrias nuevas y pueblos libres
en todos los rincones de la vieja Europa.
Este año rescatamos del
olvido al navarro Xavier Mina en su tierra natal celebrando el Bicentenario de
su muerte, y con estas palabras queremos agradecer a la Casa de Todas y Todos
de México su empeño para que Xavier ocupe el lugar que se merece en nuestra
historia común de pueblos hermanos y hermanados.
Eskerrik asko.
Les esperamos, aquí tienen
su casa.
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