Un año fuera, pero criminalizada: Nestora Salgado
Centro de Medios Libres
Phoenix, Arizona a 18 de marzo de 2017.- La criminalización en mi contra
persiste, sigo siendo perseguida y no tengo garantías de seguridad para
regresar a México.
El 18 de marzo de 2016 fui
liberada. Días antes con muchas ansias y nervios me preparaba para volver
a la calle y continuar con mi vida. En estos difíciles momentos estuve
acompañada de mis hijas, mi familia, defensoras/es de derechos humanos y de mis
abogados, a quienes continúo agradeciendo su aporte para lograr mi libertad.
Después de toda la fabricación
de delitos en mi contra, como asesinato
y secuestro, y de la tortura que
sufrí desde el primer día en que fui detenida, el 18 de marzo es y será uno de
los mejores días de mi vida.
Así como mi trabajo, mi
liberación fue forjada por el pueblo. Cada una de las acciones en Guerrero, en
México, en Estados Unidos y en diversas partes del mundo hizo posible que
juntos derribáramos los muros que hoy me permiten estar con mi familia,
mirar el sol, oler las flores y continuar la lucha.
Horas antes de salir, me enteré
de que las órdenes de libertad otorgadas a mi favor habían sido apeladas por
las supuestas víctimas. Sin embargo, a pesar de que ha pasado un año, ninguna
de estas personas se ha presentado a ratificar su denuncia, lo que impide que
mi caso sea cerrado definitivamente y abona a que la criminalización en mi
contra persista.
A pesar de ello, un día después
de salir, me reuní con organizaciones sociales para agradecer de manera
personal todo el esfuerzo que hicieron para lograr mi liberación y les informé
que mi lucha no cesaría, que lucharía para exigir la liberación de los presos
políticos en México y por la defensa de los derechos humanos, hoy mi compromiso
sigue vigente.
Pasé 940 días en la cárcel -de
manera ilegal y arbitraria-, así como lo declaró el Grupo de Trabajo sobre
detención arbitraria de la ONU en su Opinión Nº 56/2015, todos esos días,
las horas, los días y los años fuera de mi comunidad, sin el trabajo con la
policía comunitaria, los días sin mi familia y la afectación a mi salud no
serán en vano. Seguiré luchando por mi libertad absoluta y para que pueda
continuar mi labor en defensa de los derechos de los pueblos indígenas desde mi
comunidad.
Este 18 de marzo de 2017,
estaré acompañada por el Movimiento Continental por los Derechos Indígenas y el
Comité de Defensa del Barrio Tonatierra Movimiento Macehualli en Phoenix,
Arizona, juntos exigiremos el cese a la criminalización en mi contra y también
el alto a las deportaciones de la policía de Estados Unidos y a las violaciones
a los derechos humanos de las personas migrantes en este país.
Hoy más que nunca la unión
entre nuestros pueblos y la exigencia del respeto a nuestras formas de
organización comunitaria desde cualquier parte del mundo.
Atentamente,
Nestora Salgado, luchadora social, ex presa política de la
Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias-Policía Comunitaria (CRAC-PC)
de Olinalá, Guerrero.
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