Los mayos en la Historia: Para nuestros compañeros de lucha ¡Nuestro “Vivir por la patria o Morir por la Libertad”!
La Casa de Todas y Todos
Foto de portada:
Corresponsalía de Chubakai.
Retrato del Co. Ismael,
archivo de la Casa de Todas y Todos.
El mes de Mayo ha sido
importante en la historia de nuestro país, por ello en el Editorial de este mes
se recuerdan las luchas de las trabajadoras y de los trabajadores.
Saludos fraternos
Grandes acontecimientos nos motivan en Mayo a nunca
olvidarlos. El primer día del mes nos hermanamos a todos los trabajadores para
convertirnos en uno y en pie de lucha marchar para alcanzar un nuevo orden
social, basado en el trabajo colectivo, la producción material para el
bienestar social y el respeto humano como un derecho. Parece muy poco pero eso
tan sencillo, cuesta vidas. El 1º de mayo no es sólo para recordarlo, sino es
un llamado a seguir luchando para convertirlo en realidad.
El desprecio al trabajo es
un rasgo ideológico manifiesto del capitalismo actual, en el cual por un lado
se festeja el engaño y el crimen como camino al “dinero fácil”, y por el otro se establece la especulación
financiera como actividad económica privilegiada. El desprecio al trabajo está
también presente en la desarticulación de todas las herramientas de defensa
laboral, en la desaparición de derechos básicos obtenidos por aciagas luchas
obreras de más de ciento cincuenta años.
Hoy tenemos, frente a los
ojos, nuevas evidencias del desprecio al trabajo; en las noticias de la
explosión en la planta de Pajaritos, en Coatzacoalcos, con cientos de heridos y
32 trabajadores muertos, y desaparecidos, víctimas todos de la negligencia
patronal y la nula inversión en la infraestructura de una planta industrial
añeja. Y veremos en mayo, mes del trabajo pero también del maestro, nuevos
pasos de la lucha magisterial en defensa de sus derechos laborales y de la
educación al servicio del pueblo; el recurrente uso de la fuerza pública como
elemento presente en la “negociación”
con la disidencia magisterial es un claro reflejo del profundo desprecio que el
Estado mexicano, ya una filial más del corporativo de la clase capitalista,
tiene por las trabajadoras y trabajadores conscientes.
La identidad proletaria,
esa herramienta ideológica que sirvió a los pueblos para obtener las grandes
conquistas laborales del siglo XX, se ha disuelto en una multiplicidad de
nombres y causas que apuntan a demandas concretas y legítimas, muchas de ellas
sumamente apremiantes, las cuales sin embargo, en el terreno de la
confrontación política con el capital, no reúnen la fuerza necesaria para
frenar el avance, supuestamente insoslayable, del imperialismo capitalista.
Desde nuestra perspectiva
lo único insoslayable en la historia es el trabajo. En él se configura la
auténtica fuerza que arroja cambios al mundo: la vida de los pueblos. En algún
momento futuro, pensamos, la perspectiva de las múltiples luchas que hoy
levantan una pléyade de banderas, consignas y discusiones, habrá de volver la
mirada a la actividad fundamental sobre la cual se erige todo el espectro de lo
social, el trabajo, y a su vuelta –como siempre ocurre- transformarlo. Los
esfuerzos ideológicos del enemigo por llevar al olvido la palabra proletaria
tienen un justo miedo: les recuerda la capacidad de triunfo en el andar de los
pueblos. Desde esa identidad, los trabajadores del campo y la ciudad no sólo no se
quejaron: ¡vencieron!
EFEMÉRIDES:
Tenemos el deber de recordar a los héroes que nos dieron
Patria y Libertad. Xavier Mina, “el Mozo”
y Servando Teresa de Mier, “el Fraile”,
partieron un mes de mayo de hace 200 años, a la América Irredenta a luchar por
nosotros para romper las cadenas que nos sujetaban a un imperio avasallador e
inhumano.
Fue un año de intensa
preparación, sufrieron no solo la persecución de los espías imperialistas, los
menos firmes en su determinación de luchar desertaron y entregaron a las
autoridades imperiales los planes revolucionarios. Aún así contactaron a Simón
Bolívar en Haití, sufrieron el embate de un huracán que hundió uno de los
barcos y tuvieron que conseguir otro, hasta que arribaron a México en abril de
1817 con armas y una imprenta. Las luchas de liberación siempre son políticas,
y sus herramientas fundamentales, ya lo sabemos, son “las armas de la crítica”.
Fueron vidas consagradas a
nuestra libertad donde el uno perdió la vida y el otro obtuvo la cárcel. Son
nuestro ejemplo y no los olvidamos.
Recordamos a los
compañeros Ismael, Mario y Ruth
En mayo celebramos el día del nacimiento del compañero Ismael.
Lo recordamos con respeto y cariño, entregado a la organización y al estudio; y
a los compañeros Mario y Ruth, muertos en un triste mes de mayo, cumpliendo sus
deberes internacionalistas. Así poco a poco uniremos las historias y
rescataremos sus vidas de los archivos amañados de los torturadores asesinos.
Los compañeros fundadores
de éste movimiento tan digno, nos dicen en sus comunicados cómo debemos
comportarnos, así lo hemos hecho siempre, sin engaños ni abusos, con
compañerismo perene. Nos forjamos en el trabajo colectivo, en una organización
que transforma e incorpora la ética a la lucha social; no vamos a fallarles,
nuestros archivos hablarán por sí mismos.
Como grupo Editorial
formamos parte de esta nueva generación a la que le toca analizar en forma
crítica la historia contemporánea, no para quejarnos culpando a otros de
nuestros errores, y luego inútilmente dar marcha atrás, sino para transformar
con su ejemplo lo que es nuestro deber concluir.
En mayo:
Para los trabajadores
del mundo… nuestra solidaridad
Para los héroes nacionales…. Nuestra eterna gratitud y respeto
Para los héroes nacionales…. Nuestra eterna gratitud y respeto
Para nuestros
compañeros de lucha…. Nuestro “Vivir por la
patria o Morir por la Libertad”
Grupo Editorial de la Casa
de todas y todos
Mayo, 2016
Mayo, 2016
Comentarios