El que a
hierro mata a hierro ha de morir.
La Voz del Anáhuac
23 de julio de 2015
¡Fue el
ejército! Gritan madres y padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos
desde la noche del 26 de septiembre de 2014 en Iguala. Han pasado ya 10 meses
desde entonces. Ya sabemos que la “investigación”
oficial es sólo una farsa. Queremos justicia, no vendrá de arriba. Tendrá que
ser la Justicia Popular.
¡Fue el Ejército! Grita la comunidad
nahua de Santa María Ostula, atacada por soldados que al grito de “¡vivan los caballeros templarios!”,
dispararon contra el pueblo y asesinaron a Hedilberto, niño de 12 años. Tampoco
esperamos que ahí se investigue nada. Habrá la justicia que los pueblos decidan.
Sí: ¡Fue el ejército!, el mismo que de
acuerdo a la constitución tiene como mando
supremo al titular del ejecutivo, al presidente de la república, ese que se
llama Enrique Peña Nieto, sí, el que compró la presidencia con dinero de Monex,
Soriana y Televisa. Ese es el primer culpable que debe enjuiciarse. Sabemos que
ningún tribunal civil ni militar lo hará. Entonces, nosotros, los agredidos,
los atacados, los que estamos en la mira de sus armas, empuñadas por soldados,
marinos o policías, o por sicarios de los narcos, da igual, son lo mismo, debemos
enjuiciarlo, destituirlo. Para ello tenemos el Art. 39 constitucional.
¿Ejecutarlo?
Vale más una bala que su depreciable vida. Peor castigo para esta sanguijuela
será aplicarle la Justicia Popular, la que practican las Policías Comunitarias:
ponerlo a trabajar para la comunidad. No esperamos que se reeduque, alimañas
ponzoñosas de esa especie no se reeducarán jamás, pero para alguien tan
arrogante, soberbio y estúpido no hay peor castigo que ese: ponerlo a trabajar
para la prole que tanto desprecia. En muy probable que intente escaparse, como
su socio y amigo el Chapo. Entonces
sí, no habrá más remedio que aplicarle la “ley
fuga”. La que ellos mismos aplican frecuentemente contra los luchadores
sociales. El que a hierro mata a hierro ha de morir.
Pero esta
es todavía apenas una propuesta para la hora de enjuiciarlo, queda abierta esta
página para recibir más propuestas de cómo aplicar la Justicia Popular contra
quienes vigilan, aprehenden, torturan, encarcelan, desaparecen, asesinan a los
luchadores del pueblo. Envíen pues cada quien sus propuestas, aquí las
publicaremos.
Comentarios
Abolición de los ejércitos y fuerzas policíacas.