Publicado el 19/12/2014
VIDEO: «LAS
PRISIONES NO NOS VAN A DETENER, LAS TUMBAS NO NOS VAN A CALLAR»
Actividades
realizadas el pasado 9 de diciembre [2014], en una protesta convocada por
Amig@s de Mumia en México, para exigir la liberación de Mumia Abu Jamal quien
ese día cumplió 33 años de injusta reclusión –y en contra de la nueva ley
mordaza; aprobada en Pensilvania hace casi dos meses para coartar las formas de
expresión de las personas privadas de libertad en ese estado.
Lo
acusaron los blancos de matar a un blanco,
lo juzgaron los blancos, lo condenaron los blancos,
lo iban a ejecutar los blancos, lo custodian los blancos.
«L@s condiscípul@s II. Faltan l@s pres@s polític@s», SCI Marcos
lo juzgaron los blancos, lo condenaron los blancos,
lo iban a ejecutar los blancos, lo custodian los blancos.
«L@s condiscípul@s II. Faltan l@s pres@s polític@s», SCI Marcos
Cada unx de lxs asistentes
escribiría sobre un pedazo de tela para atarlo sobre su boca. Frases como «quema
el poder», «no nos callarán» y «libertad a Mumia», se trazaron
sobre las mordazas para, después de expresar algún mensaje solidario,
incendiarlas frente a las vallas que protegen la embajada del indefendible
gobierno de Estados Unidos, en la Ciudad de México.
Otra
de las participaciones musicales estuvo a cargo del rap de Fuera de
Servicio, con Diidxa y Macandal, cuyas letras cuestionan el sistema
establecido que nos deshumaniza cotidianamente y expresan su imaginario de ese
otro mundo posible. Además de los raperos PorkoNero y Nya
Joer de la comunidad de San Francisco Xochicuautla, quien recordó a los ocho presos
políticos del pueblo hermano de San Pedro Tlanixco.
Asimismo,
tres compañeras improvisaron versos que enfatizan las luchas feministas en
México, exigiendo también la liberación de las presas políticas en el país.
Por
su parte, Eva –compañera del activista Kuykendall, quien fue asesinado durante
la protesta del 1º de diciembre de 2012– acompañada por un guitarrista y otra
mujer, cantaron en solidaridad con Mumia y sobre la inexistente justicia en
México y Estados Unidos.
El
motor que amplificaba el sonido de cada nota y palabra emitidas, se impulsaba
desde una bicicleta en la que algunxs asistentes se turnaban para pedalear a lo
largo de las participaciones.
Durante
todo el evento cuatro mujeres pintaron una imagen de Mumia en una manta sobre
el suelo; el diseño se traspasó y ahí también quedó dibujado. El cemento se
convirtió en un lienzo para la denuncia, para expresar la libertad a la que
aspiramos dentro y fuera de una cárcel, porque el sistema capitalista aprisiona
también; las rejas son sólo unas de sus múltiples modalidades de represión y
silenciamiento.
Por
ejemplo, la criminalización de la protesta durante el sexenio de Enrique Peña
Nieto en México, se ha vivido de manera exacerbada, con detenciones arbitrarias
a estudiantes, activistas, integrantes de medios libres y personas inconformes,
así como con golpes sin ton ni son por parte de policías, durante las
movilizaciones en las calles de la Ciudad de México. Incluso, en los últimos
meses se ha implementado un método nuevo –al menos para la generación que lo
vive actualmente, pues hasta ahora era sólo un referente histórico–: vigilancia
e intentos de secuestro por parte de policías vestidos de civil; represión a
domicilio.
No
es casual, es una violencia sistemática para desmovilizar y amedrentar la
disidencia. Como en el caso de Mumia, no es casual que esté preso o que
implementen una ley para callarlo aún tras las rejas.
La represión
está vigente y se intensifica a cada paso, junto con los agravios que se
acumulan en el país. La protesta existe porque el Estado promueve la
desigualdad, pero la digna rebeldía la repele con música, baile, gritos en las
calles, con la reapropiación de la palabra, el empoderamiento de las
herramientas tecnológicas de los poderosos, con organización comunitaria. Esto
fue evidente durante el acto en solidaridad con Mumia. Canto, música, palabras
libertarias, mantas que gritan justicia y la difusión por todos los medios
posibles.
Comentarios