por Mumia Abu-Jamal
Sentí un tremendo shock y una profunda tristeza al recibir la
noticia de la trágica –se podría decir incomprensible– muerte de Malcolm Latif
Shabazz, nieto del ícono y líder nacionalista negro, Malcolm X.
Nacido el 8 de octubre de 1984, dos
décadas después del asesinato de su afamado abuelo, el joven Malcolm tenía la
misma belleza esbelta y angular, al grado que la sombra de su abuelo se
reflejaba en su cara.
Pero la cara del joven llevaba mucho
más, porque en sus ojos permanecía el inconfundible destello del dolor de los
seres una vez encarcelados. Su reclusión ocurrió al final de su niñez cuando un
error suyo se transformó instantáneamente en lo impensable; un incendio que él
provocó reclamó la dulce vida de su abuela, la doctora Betty Shabazz, y marcó
la vida del joven para siempre.
Los detalles de su paso a la
eternidad no están claros, pero parece que durante un viaje a México, estuvo
involucrado en un pleito sobre el pago de una cuenta. Y los cobradores, quienes
no han de haber apreciado mucho a los yanquis en todo caso, lo mataron a
golpes.
En su relativamente corta vida, es
posible que Malcolm haya viajado tanto como su abuelo; visitó Francia, Libia,
Venezuela y desgraciadamente, México.
Malcolm Latif Shabazz, nieto de
Malcolm X, tenía 28 años cuando regresó a sus antepasados.
Desde la nación encarcelada, soy
Mumia Abu-Jamal
-© ’13 maj
18 de mayo de 2013
Audio grabado por Noelle Hanrahan: www.prisonradio.org
Texto circulado por Fatirah Litestar01@aol.com
Traducción Amig@s de Mumia, México
18 de mayo de 2013
Audio grabado por Noelle Hanrahan: www.prisonradio.org
Texto circulado por Fatirah Litestar01@aol.com
Traducción Amig@s de Mumia, México
Comentarios