Zapateando
Publicado el 28 / marzo /
2016
Jusalve.- Desde 1993 los pobladores de Altamira La
Providencia, municipio de Huixtla, Chiapas –conformada por hijas, hijos, nietas
y nietos de campesinos que trabajaron en las fincas ganaderas y cafetaleras– decidieron
fundar su comunidad y poblado en una zona de tierras más alta a la que la Reforma
Agraria les había asignado –un total de 899 hectáreas– por estar estas tierras
en su gran mayoría en una zona de inundación.
En las tierras ocupadas,
estas personas campesinas construyeron sus casas, la iglesia, escuelas y
gestionaron el servicio de energía eléctrica en 1994. En 2006 la Comisión
Federal de Electricidad construyó la red de energía eléctrica. Estas tierras
las utilizaron para sembrar milpa, frijol, melón, pepino, sandía, chile,
plátano, calabaza, mango, ajonjolí y también una parte para ganadería.
El comunicado emitido el
23 de marzo por las autoridades del poblado explica que: “en 2006 demandamos al Tribunal Agrario la titulación de las tierras
que estábamos trabajando de manera colectiva. En diciembre 1 de 2009, el
Tribunal Agrario nos notificó, mediante una sentencia que no nos podía otorgar
las tierras porque era propiedad privada”.
Ellas y ellos demandan que
durante trece años nadie les dijo nada y nunca supieron que existieran dueños
de las tierras que estaban ocupando, ya que sabían que eran tierras nacionales.
Como consecuencia, a partir de 2010 y 2015 los han intentado desalojar de
manera constante. Actualmente el Tribunal Unitario Agrario 4 ha ordenado un
desalojo para el día 28 de marzo de 2016, solicitando la presencia de por lo
menos 500 policías.
Por tanto, los pobladores
de Altamira La Providencia exigen que sus derechos humanos sean respetados, declaran
que:
“Responsabilizamos al Tribunal Unitario Agrario Cuatro, que
por no considerar nuestra historia y el tiempo que llevamos trabajando la
tierra, de las violaciones a nuestros Derechos Humanos como el derecho a la
tierra, el derecho a un trabajo digno, derecho a la alimentación, el derecho a
una vivienda, el derecho a una vida libre de violencia, el derecho a la
educación y el derecho al culto. Asimismo, como campesinos responsabilizamos al
Tribunal Unitario Agrario del despojo que vamos a sufrir, de las agresiones
físicas y psicológicas que se cometerán en contra nuestra”.
“Solicitamos al gobierno municipal, estatal y federal que
busquen vías de solución pacífica a la problemática que estamos viviendo los
habitantes de Altamira La Providencia, Huixtla, Chiapas porque creemos que la tierra es de quien la trabaja”.
A
continuación en texto íntegro de la denuncia:
Denuncia de
las autoridades de Altamira La Providencia, Huixtla, Chiapas
CDH Frayba
Altamira La Providencia,
municipio de Huixtla,
Chiapas. 23 de marzo de
2016
A los organismos
Defensores de Derechos Humanos
A las autoridades
estatales y federales
A la opinión pública
A la prensa local,
estatal, nacional e internacional
A los medios de
comunicación alternativos
A las organizaciones
independientes
A todo el pueblo de México
y del mundo
Somos pobladores de Altamira La Providencia, municipio de
Huixtla, Chiapas. En total somos 306 habitantes, de los cuales 129 son menores
de edad y cinco personas discapacitadas. Fundamos nuestra comunidad desde 1993,
somos hijas, hijos, nietas y nietos de campesinos que trabajaron en las fincas
ganaderas y cafetaleras, asimismo, muchos de nuestras abuelas y abuelos
hablaban lengua indígena mam.
Ante la falta de tierras,
en 1981 comenzamos a gestionar ante Reforma Agraria que nos dotaran de tierras
en el municipio de Huixtla denunciando la afectación 6000 hectáreas. En 1993
salió una resolución presidencial a favor de 899 hectáreas de las cuales, las
tierras que estábamos gestionando no salió a favor nuestro. Las tierras que
salieron a favor, en su gran mayoría era zona de inundación por lo que
decidimos fundar nuestro poblado en una parte alta mientras continuamos
gestionando ante Reforma Agraria.
Desde esos años, 1993,
comenzamos a organizarnos para construir nuestras casas, iglesia, escuelas y
gestionamos servicio de energía eléctrica en 1994. En 2006 la Comisión Federal
de Electricidad construyó la red de energía eléctrica. Las tierras que ocupamos
desde entonces las comenzamos a utilizar para sembrar milpa, frijol, melón,
pepino, sandía, chile, plátano, calabaza, mango, ajonjolí y también ocupamos
una parte para ganadería. De 1998 al 2010 sembramos palma africana. En la
mayoría de nuestros productos los vendemos tanto en Tapachula como en Villa
Comatitlán y Huixtla.
En 2006 demandamos al
Tribunal Agrario la titulación de las tierras que estábamos trabajando de
manera colectiva. En diciembre 1 de 2009, el Tribunal Agrario nos notificó,
mediante una sentencia que no nos podía
otorgar las tierras porque era propiedad privada. Durante trece años nadie
nos dijo nada y no supimos que existieran dueños de las tierras que estábamos
ocupando ya que sabíamos que eran tierras nacionales. Después de ese año nos
han intentado desalojar de manera constante. Tanto en 2013 y 2015 intentaron
desalojarnos y de nueva cuenta el Tribunal Unitario Agrario Cuatro ha ordenado
que nos desalojen el día 28 de marzo de 2016 solicitando la presencia de por lo
menos 500 policías. Por esta amenaza y agresión que estamos sufriendo por el
Tribunal Unitario Agrario denunciamos:
Responsabilizamos al
Tribunal Unitario Agrario Cuatro, que por no considerar nuestra historia y el
tiempo que llevamos trabajando la tierra, de las violaciones a nuestros
Derechos Humanos como el derecho a la tierra, el derecho a un trabajo digno,
derecho a la alimentación, el derecho a una vivienda, el derecho a una vida
libre de violencia, el derecho a la educación y el derecho al culto. Asimismo,
como campesinos responsabilizamos al Tribunal Unitario Agrario del despojo que
vamos a sufrir, de las agresiones físicas y psicológicas que se cometerán en
contra nuestra.
Solicitamos a los
organismos Defensores de Derechos Humanos que vigilen la no violación a nuestros
derechos y exijan a las autoridades que respeten nuestros derechos y reconozcan
nuestra historia como pobladores de Altamira La Providencia.
Solicitamos al gobierno
municipal, estatal y federal que busquen vías de solución pacífica a la
problemática que estamos viviendo los habitantes de Altamira La Providencia,
Huixtla, Chiapas porque creemos que la tierra es de quien la trabaja.
Atentamente
Autoridades
del poblado Altamira La Providencia, Huixtla, Chiapas.
Alfredo Ángel Ruedas
Vázquez, Consejo de Vigilancia
Bulmaro Reyes Barrios,
Juez Rural
Joaquín Trujillo Pineda,
Secretario del Juez Rural
Comentarios