Paro y toma del CCH-Azcapotzalco en solidaridad con normalistas de Ayotzinapa y lucha en el Politécnico

Recibimos de estudiantes del CCH Azcapotzalco el siguiente mensaje:

Compañeros estudiantes del Colegio de Ciencias y Humanidades plantel Azcapotzalco me piden informar:

Que con base en acuerdo de asamblea celebrada el día de hoy, 30 de septiembre, a las 13:00 y 15:00 horas, el CCH Azcapotzalco ha sido tomado por estudiantes del plantel cómo medida de apoyo a los compañeros del Instituto Politécnico Nacional, quienes mantienen una ardua lucha por la derogación del nuevo reglamento y plan de estudios de ésta institución. Así mismo los compañeros del CCH Azcapotzalco refrendan con éste acto la solidaridad con los compañeros normalistas de Ayotzinapa, Guerrero, repudiado una vez más el cobarde asesinato de, hasta ahora, 4 normalistas.

Los estudiantes del CCH que mantienen tomadas las instalaciones denuncian que en lo que va del paro ya han recibido intimidaciones por parte de los directivos del plantel así como de los grupos porriles, piden apoyo y difusión, pues el acuerdo de asamblea es que la escuela será entregada hasta el jueves 2 de octubre a las 12:00 de la tarde.

Desde este espacio, el colectivo Azcapotzalco, adherente a la Sexta Declaración de la Selva Lacandona, saluda esta acción solidaria de los estudiantes del CCH-Azcapotzalco.

La toma del plantel, durante 36 horas, muestra de manera clara y contundente el espíritu solidario de los compañeros del CCH hacia la lucha de los estudiantes del IPN contra las reformas neoliberales que pretenden imponerles las autoridades del Politécnico en el reglamento y los planes de estudio de esta institución. La lucha de estudiantes y profesores del IPN es parte de la lucha iniciada por el magisterio el año pasado contra la reforma educativa neoliberal impuesta por el gobierno de Peña Nieto, aprobada en las cámaras de senadores y diputados con la complicidad de todos los partidos políticos. Y lo es también de la lucha que en la UNAM han sostenido los estudiantes de los CCHs contra las respectivas reformas que ha querido implantar la rectoría en la cirrícula respectiva. Por su parte, las Normales Rurales han sostenido desde hace décadas una persistente lucha en defensa del modelo educativo popular que les dio origen en la época cardenista y que sufrió el primer gran golpe en 1969, cuando en genocida Díaz Ordaz cerró la mitad del total de Normales Rurales que entonces existían. Desde entonces las Normales Rurales han resistido un asedio permanente de parte de los sucesivos gobiernos. Contra la de Ayotzinapa hay especial saña por parte del gobierno, pues no hay que olvidar que en ella se han forjado grandes luchadores sociales, basta mencionar a Genaro Vázquez Rojas y a Lucio Cabañas Barrientos, ambos dirigentes magisteriales y posteriormente guerrilleros.

Hoy, la masacre desatada contra normalistas de Ayotzinapa en Iguala, Guerrero, la noche del 26 de septiembre, es una muestra más del exacerbado odio del poder hacia este contingente combativo del movimiento estudiantil y del nuevo magisterio que ahí se forma.

Por todo esto, nos satisface dedicar este breve espacio a las luchas congruentemente sostienen ahora los politécnicos, los normalistas y los ceceacheros.

Repudiamos la acción criminal del gobierno municipal de Iguala y estatal de Guerrero contra nuestros compañeros normalistas.

Repudiamos el servilismo de la directora del IPN ante el gobierno y su actitud prepotente hacia nuestros compañeros politécnicos.

Repudiamos las amenazas de los directivos del CCH y los grupos porriles a su servicio, compañeros ceceacheros.