Viernes, 31 Enero 2014
por Mumia Abu-Jamal
Traducción Amig@s de Mumia, México
A la estrella de la Asociación Nacional de Basquetbol (NBA) Dennis Rodman, le puede parecer que el mundo está en
guerra con él, pero no es cierto, porque los medios masivos no son el mundo.
Ellos son la propiedad privada de los ricos y una herramienta del Estado. Y
esto es especialmente cierto cuando su objetivo es una persona negra.
Por atreverse a visitar a Korea del Norte, Rodman ha sido objeto de burla y acosado por
periodistas que no tienen el derecho a exigir que él brinde un servicio para el
que no ha sido preparado.
Rodman no es un diplomático aunque
es un fantástico jugador de basquet.
¿No resulta extraño que el
Departamento de Estado no tenga ninguna influencia verdadera en el país, pero que un jubilado jugador de basquet tenga
bastante? ¿O que la nación que encierra más presos que cualquier otra nación en
el mundo se atreva a quejarse de un solo preso estadounidense?
Rodman no tiene por qué disculparse.
Estados Unidos se
queja de los presos políticos de Korea del Norte. ¿Y qué tal Leonard Peltier, “los
9 de MOVE”, “los 5 cubanos”, Dr.
Mutulu Shakur, Russell Shoatz, o Chelsea (antes conocido como Bradley Manning)?
¿O qué tal la recién liberada Lynne Stewart?
Dennis, quien se supone es un
ciudadano de EU, puede ir a donde se le pegue la gana. Y debe tener la
posibilidad de hacerlo sin el hostigamiento de una prensa corporativa y
sensacionalista.
Desde la nación
encarcelada, soy Mumia Abu-Jamal.
©
’14 MAJ
18
de enero de 2014
Audio
grabado por Noelle Hanrahan: www.prisonradio.org
Texto
circulado por Fatirah Litestar01@aol.com
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