La tiranía mexicana reclama las plazas para festejar. En México no hay cabida ya para un movimiento "reformista electorero"
por
Erwin Flores Contreras
Martes,
17 de septiembre de 2013
Toda debacle de tiranías en la historia de México han sido acompañadas
por un desastre natural, sumando a esto, el acumulamiento (con los años) de una
rabia de la población (trabajadores explotados, campesinos pobres, hambrientos,
comunidades carentes de los servicios básicos, desempleados, etc) contra ellos,
genera un escenario de convulsión social.
Hoy en México los pripartidos políticos: Partido Acción Nacional (PAN) y en Partido
de la Revolución Democrática (PRD) principales fuerzas retrógradas y
entreguistas del país han afianzado una mezquina y pragmática alianza llamada "pacto por México" abanderado
por su nodriza el Partido Revolucionario Institucional (PRI), cuyo objetivo es
asumir sin discusión y con tremenda agudeza su subordinación a Washington.
El ataque visceral del gobierno y sus amos magnates
de la industria de los medios de comunicación contra el movimiento magisterial
encabezado por la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE)
disidencia del oficialista Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación
(SNTE; cuya dirigencia es hoy rebasada y desconocida por sus bases en varios
estados de la moribunda república mexicana) responde a que este gremio de
profesores y administrativos del sector educativo se han opuesto a la
privatización de la educación y al aniquilamiento del derecho de los
trabajadores de organizarse en sindicatos, y no sólo eso, sino que han forjado
un movimiento social sin precedentes en el país en los últimos años, que dio
inicios en el estado de Guerrero en el mes de abril donde en su más álgido momento
de las movilizaciones contra las reformas al sector educativo (hoy ya aprobadas
por el ilegítimo congreso nacional ) fue la quema de edificios del PRI, PAN y
del supuesto partido de las izquierdas el PRD, en la capital del estado de
Guerrero, Chilpancingo, demostrando así el repudio total al mal de todos los
males en México que son los ya mencionados partidos políticos.
A estas alturas a escala nacional el movimiento
magisterial en el Distrito Federal (DF) encabezado por secciones magisteriales
de Oaxaca, Michoacán y las aglutinadas en la capital del país y con el accionar
de otras en sus respectivos lugares de origen (Chiapas, Campeche, Yucatán,
Quintana Roo, Tabasco, Veracruz, Puebla, Durango, Jalisco, Tlaxcala, Guanajuato
y otros lugares) están luchando por la abrogación de la reforma privatizadora y
anti sindicalista al ramo educativo que sin consulta al magisterio ni al pueblo
aprobaron los miembros del "Pacto
por México".
Muchas de las acciones de "insurgencia
social" propuestas por el gremio magisterial en lucha, han sido secundadas
por estudiantes, socialistas, anarquistas, colectivos, por gremios
sindicalistas a nivel nacional, por organizaciones campesinas regidas bajo el
esquema de autoridades comunitarias, colonos en zonas urbanas y de sectores de
defensores del territorio y los recursos naturales.
En este contexto la lucha de clases se
intensifica en México, los privilegiados del régimen tiránico de partidos agreden,
insultan y atacan a quienes no aceptan las disposiciones del Estado Mexicano.
En las penumbras de los acostumbrados festejos patrios en México, cada día el
sector más consciente de los trabajadores, campesinos, estudiantes y
vilipendiados en México han dado tremendos golpes políticos a un régimen
tiránico sin legitimidad ni consenso nacional. Hoy palpamos en México un
movimiento que podría ser el eslabón que una después de 200 años el anhelo de
libertad, justicia e igualdad que se le ha negado a este pueblo.
Mientras tanto el régimen con uso de sus
militares y policías reclamó las plazas que tenían tomadas los profesores para
realizar sus festejos patrios,
festejos que hoy al igual que en el cumpleaños del dictador Porfirio Díaz un 15
de septiembre hace casi cien años, es opacado por los cientos de presos
políticos en el país, la ilegitimidad de su poder y por la desigualdad social.
En México no hay "primavera mexicana" ni "movimiento de indignados" en México no hay cabida ya
para un movimiento "reformista
electorero" ni mucho menos se guía bajo un programa sistematizado tras
la lógica de domesticar al capitalismo. En México se ha venido gestando desde
hace 40 años un movimiento político "refundacional
socialista" que va por el aniquilamiento de la burguesía y sus aliados
en estas tierras del orbe y que hoy en este año 2013 se ha manifestado con
mayor fuerza.
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