por Colectivo Magisterial "Leonel
Calderón Villegas"
05/09/2013
Michoacán, México, Otoño del 2013
A los trabajadores de la educación
Al pueblo en general:
Compañeros trabajadores de la educación, en un
evento premeditado, autoritario y prepotente utilizando el clásico madruguete legislativo
a la usanza del priísmo, finalmente fue aprobada la tercera Ley del Servicio
Profesional Docente, que constituye el principal armazón de la reforma
educativa neoliberal. En un acto de cobardía y traición de las "fuerzas progresistas"
autodenominadas a sí mismas de "izquierda",
el anunciado "albazo" se
concretó la noche-madrugada del primero de septiembre, asestándole una puñalada
trapera al magisterio democrático y al conjunto de los docentes sindicalizados.
Esta Ley Secundaria del Servicio
Profesional Docente es punitiva e inquisitoria, porque destruye las formas
organizativas en el ejercicio de la democracia sindical, constituye un
retroceso histórico en la conquista de los derechos laborales y sindicales adquiridos
en décadas de lucha por el esfuerzo de millones de trabajadores de la educación
y pueblo en general, gestas en las que no solo hemos participado los docentes,
junto a nosotros han marchado organizaciones populares, padres y madres de
familia que ofrendaron sus esfuerzos-y hasta su vida en algunos casos- por el
futuro de sus hijos, por el futuro de México.
Con la aprobación de la tercera Ley
secundaria de la "reforma
educativa" se asesta una puñalada a la educación pública, laica,
científica, y gratuita; se sientan las bases jurídico-políticas para que el
cretinismo social se enraíce en el país. Con esta "reforma" se persigue la reproducción de sujetos
alienados y enajenados en el proceso laboral, al servicio del capital, es
decir, que vivan en y para el trabajo, proceso del cual los únicos beneficiados
serán los grupos oligárquicos que ya se frotan las manos en el reparto de las
millonarias ganancias que representa esta embestida neoliberal.
En tanto que a los trabajadores de la
educación se nos pone en la condición de esclavos modernos, en donde nuestros
derechos laborales y sindicales se pulverizan en nombre de la "calidad educativa", de la "modernización", del "desarrollo del país" y de la
democracia burguesa.
Claro está que la reforma neoliberal
educativa tiene dedicatoria, con ella se pretende doblegar el espíritu de lucha
del movimiento magisterial democrático, degradar la profesión docente
situándola en el ocaso de la dignidad humana y laboral; la acometida consiste
en el sometimiento político e ideológico absoluto, con el que se pretende
situar a los maestros en la disyuntiva de aceptar dócilmente el mandato
gubernamental, o formar parte de las estadísticas de los despidos masivos "justificados" por la Ley del
Servicio Profesional Docente.
Con este "albazo" desde las cúpulas oligárquicas y sus testaferros
los políticos de oficio, han enfilado sus dagas neoliberales hacia el
movimiento magisterial democrático, para ello han echado mano de una campaña
mediática de linchamiento, que se propone manipular las conciencias a través de
la desinformación, la calumnia y el miedo para justificar la represión, al
tiempo que se utiliza de ariete político a los padres de familia para seguir
golpeando al magisterio democrático.
La campaña mediática contra el magisterio,
es un ardid gubernamental, para engañar, confundir y manipular a padres de
familia y al pueblo en general, el argumento falaz de que se afecta a terceros
carece de todo fundamento, puesto que la lucha no es exclusivamente por
nuestros derechos laborales y sindicales, nuestra lucha va más allá de los
límites gremiales, comprende en esencia la defensa del derecho a la educación
pública, laica y científica y los derechos universales del ser humano.
Respecto que se afecta a los niños con
el paro indefinido, es otro engaño de la oligarquía, los niños han sido
afectados desde el momento en que estas reformas neoliberales son impuestas
bajo el criterio del autoritarismo y de manera unilateral, negando todo intento
de aporte de los verdaderos especialistas en la materia en el proceso de
enseñanza-aprendizaje.
Por lo anterior expuesto consideramos
que es una necesidad apremiante continuar en la lucha por la derogación de
estas nefastas modificaciones a la constitución, que son agresiones directas a
los derechos del pueblo y de los trabajadores de la educación. El paro
indefinido debe continuar bajo nuevas modalidades con la iniciativa y
creatividad de las bases magisteriales, en donde se contrarreste la campaña
mediática de linchamiento en contra de los trabajadores de la educación.
Ante el chantaje y la amenaza de
Estado, no basta la desobediencia y la resistencia civil pacífica, se requiere
de acciones políticas de masas de contundencia y alcance nacional, en donde se
contemple la participación activa de los padres de familia, de diversos
sectores del pueblo, el apoyo y solidaridad de distintas organizaciones
populares y gremiales, que la protesta e indignación se transforme en una
jornada nacional de lucha contra el conjunto de las reformas neoliberales sustentadas
en la existencia de un aparato policiaco-militar, una política profascista y el
autoritarismo cómplice de los poderes ejecutivo y legislativo.
¡Compañeros!, ¡Camaradas!: la realidad
exige impulsar un verdadero proceso de unidad que acabe con la dispersión
política e ideológica, con las divergencias que aprovecha la burguesía para
golpear al movimiento magisterial y mantener la división entre los oprimidos y
explotados de los diversos contingentes en lucha. Por la fuerza de los
acontecimientos y las embestidas neoliberales, se convierte en una necesidad
impostergable la unidad; superar la etapa de la lucha gremialista y sectorial
que limita las perspectivas de una lucha con objetivos sociales de carácter
histórico que transformen de raíz nuestra sociedad.
La aprobación de las leyes secundarias
que sustentan las modificaciones a los artículos 3° y 73 constitucionales no
significan una derrota para el movimiento magisterial como pretenden hacer
creer el gobierno y sus testaferros, por el contrario debemos convertir este
sentimiento de impotencia e indignación en renovados bríos para reimpulsar la
lucha no solo por la abrogación de estas leyes, sino para conquistar el derecho
a una educación crítica, científica y popular como parte de un proyecto
histórico que anuncia el advenimiento de una nueva sociedad.
En esta JORNADA DE LUCHA Y RESISTENCIA
MAGISTERIAL ACTIVA no debemos dejar espacio a la frustración, desmoralización,
pesimismo, derrotismo y conformismo. Nuestra fuerza radica en la razón que
impulsa nuestra causa y en las bases magisteriales, desarrollemos la
creatividad e iniciativa, la crítica y autocrítica para encausar por el sendero
del triunfo a nuestro movimiento.
¡POR LA DEFENSA DE LA EDUCACIÓN PÚBLICA
Y POPULAR!
¡POR LA UNIDAD OBRERO-CAMPESINO-MAGISTERIAL!
¡EN LA LUCHA CONTRA LAS REFORMAS
NEOLIBERALES!
¡NI UN PASO ATRÁS!
Colectivo Magisterial "Leonel Calderón Villegas"
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