Un
atropello anunciado: la “limpieza”
del Zócalo
Por
Carolina S. Romero
El secuestro del Centro de la Ciudad de
México por un sinnúmero de escuadrones de policía el viernes 13 de septiembre,
dificultó el paso de un equipo de compañeros de medios libres que intentamos
llegar al Zócalo alrededor de las 3:30 de la tarde para darle cobertura a la
situación de los maestros disidentes ante el inminente desalojo de su plantón.
Supimos que el secretario
de gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, a través del secretario de gobierno
del Distrito Federal, Héctor Serrano, había dado un primer ultimátum a la
Coordinadora Nacional de Trabajadores de Educación (CNTE): el Zócalo sería
desalojado a las 14:00 de la tarde. Luego vino el segundo: las tropas entrarían
a las 16:00.
Tanto el gobierno de
Enrique Peña Nieto como el de Miguel Ángel Mancera lo habían dejado en claro:
la ceremonia del Grito de Independencia se daría en un Zócalo “limpio”.
La presencia de unos maestros dignos y rebeldes no sería tolerada en sus ‘fiestas patrias’.
El vacío del Zócalo
Con
gran desánimo constatamos la manera de atender las demandas de amplios sectores
del país. Compartimos imágenes inéditas del desalojo de la plaza pública más
grande del país... (video)
¿Y sus justas demandas? ¿Sus
derechos laborales? ¿La educación pública y gratuita? Mejor olvídense de todo
eso; las reformas acordadas en el Pacto
por México tienen más importancia que la Constitución, y las ganancias de
los empresarios, la clase política, la clase criminal, tienen mucha más
importancia que el futuro de los niños y niñas de México.
Un chavo que caminaba por
la banqueta ofreció a todos los paseantes un amable consejo: “No vayan al zócalo. Por ahí les matan
gratis”. Un loco, ¿no? O tal vez no tan loco considerando que el centro de
la capital ya se había convertido en un campo de batalla. Se veían por los
menos dos helicópteros haciendo constantes sobrevuelos arriba del plantón y
se escuchaba el inquietante ruido de las aspas. Desde el día anterior se
rumoraba que habían llegado tanquetas a la plaza de Santo Domingo –todo este
equipo seguramente disponible para la represión gracias a la Iniciativa Mérida-. Ahí estaban las
calles llenas de policías militarizados que tenían las órdenes del presidente a
quien “nunca le tiembla la mano”.
Ya lo había demostrado en las calles de Atenco y también a las afueras de San
Lázaro. Alexis. Javier. Kuy. El Tío. ¿Se acuerdan?
En la esquina del Eje
Central con la avenida Madero topamos con un grupo de compañeros solidarios
quienes obviamente no aceptan que el Pacto
de México vaya a determinar el futuro del país. Llevaban una manta con el
letrero “Gracias Maestros. Nos enseñaron
a leer y ahora nos enseñan a luchar”. Ante un contingente de policías que
se les acercaron, gritaron: “¡No pasarán!
¡No pasarán!” Y los granaderos se echaron para atrás. Por lo menos en ese
momento.
Logramos entrar en la zona
secuestrada, y al caminar por la calle 5 de Mayo, encontramos fogatas, un par
de vallas metálicas y varias casas de campañas vacías o casi vacías. Cada
docente llevaba un tubo o palo por si acaso. Supimos que la mayoría de los
maestros ya se habían retirado pero unos sectores de la Sección 22 de Oaxaca se
quedaron para resistir la agresión. Seguimos caminando por el Zócalo hasta las
calles de Pino Suarez, 5 de Febrero y 20 de Noviembre, donde la barricada hecha
de vallas metálicas fue reforzada con una enorme grúa. Los maestros señalaron a
unos agentes vestidos de civil que llevaban explosivos. Recriminaron a la prensa
vendida y gritaron, “¡Adelante, adelante,
la lucha es constante!”
En una breve entrevista, un
compañero que se identifica como maestro de base dijo: “Desde la mañana nos han intimidado con helicópteros para meternos
miedo, pero nosotros ya hemos vivido este asunto en el estado de Oaxaca. No es
la primera vez que hemos enfrentado esta situación. La consigna es ‘Primero la
Patria’. Y si no quiere respetarnos el gobierno, estamos dispuestos a morir.
Que nos maten a todos. Estamos en nuestro derecho y la Constitución política lo
estipula. Tenemos el derecho del descontento a la imposición de la reforma
educativa. No al mejoramiento educativo sino a la reforma estructural. Ya está
en la mesa la reforma hacendaria y la reforma energética, y lo que quieren es que
nos retiremos de aquí. No, no. No nos vamos a retirar. Todo lo contrario. Nos
estamos reorganizando para estar de frente con esta lucha. Entonces la consigna
es: ‘Vamos a defender la patria’. Formamos parte de la Sección 22. Somos
un gremio y la lucha es de todos. El dolor que nosotros sufrimos es de la
sociedad también. Entonces a la sociedad le estamos haciendo la invitación de
incorporarse con nosotros”.
A las 4:20 la mayoría
de los 3,600 policías federales, bajo el mando de Manuel Mondragón y Kalb vinieron
corriendo desde la calle Moneda, destruyendo todo en su paso y echando gases
lacrimógenos y torrentes de agua al atravesar el Zócalo. Algunos se quedaron en
la plancha para derrumbar las casas de campaña mientras otros procedieron por
las calles aledañas. Al llegar a la barricada en la calle 20 de Noviembre,
fueron recibidos con una lluvia de piedras, tubos y vallas metálicas que
volaron por el aíre antes de que los maestros, estudiantes y gente
solidaria se vieran obligados a replegarse. No satisfechos con haber desalojado
el plantón, los contingentes de policías los persiguieron hasta Izazaga, donde
hubo enfrentamientos, y luego por Arcos de Belén y las calles aledañas al Eje
Central hasta Bellas Artes y la Alameda. En una serie de refriegas las y los
compañeros les echaron a los uniformados lo que tenían a la mano y gritaron: ¡Asesinos, asesinos, asesinos! Hubo
golpizas, mucha gente herida y más de 65 detenciones.
Y ahora, con la “limpieza” realizada ¿Cuál es la
independencia que se va a festejar? ¿Y cuál es el tamaño del coraje que se
siente en el corazón del pueblo?
Movilización masiva vuelta en un grito de rebeldía, un grito de
insumisión
Por Lucero Mendizábal
A las 17 horas del 15 de septiembre, la
presencia de estudiantes, maestras/os y población civil que se dieron cita en
la Estela de luz, no parecía rebasar tan altas expectativas. Poco a poco la
gente fue llegando, la estación del metro Chapultepec principalmente en sus
andenes, comenzaba a poblarse de grupos de jóvenes cargando en sus manos
carteles. Se esperaban, se organizaban, en menos de una hora esas decenas de
personas se perdieron entre una gran multitud que sin duda sorprendió a gran
parte de asistentes y observadores. Oleadas humanas, mareas interminables de
maestras y maestros de diferentes estados formaban contingentes diversos,
estudiantes, no estudiantes, Veracruz, Michoacán, Puebla, Estado de México,
Oaxaca, entre otras secciones magisteriales de las cuáles no iban cinco
personas sino decenas, hasta formar ríos de centenares que se iban sumando a la
par que avanzaba la marcha sobre la avenida Reforma de la capital del país.
Al inicio y encabezando la
manifestación familiares de maestros encarcelados, profesores golpeados y
detenidos en la represión del pasado viernes 13 de septiembre. Mientras se
organizaban para salir, a los costados se divisaba una presencia importante de
familias y citadinos que llegaron para apoyarles. Algunos llevaban letreros en
apoyo al magisterio con distintas expresiones de solidaridad: “Aguanta magisterio el pueblo se levanta”,
“Alto a la represión”, “No a la reforma energética, ni educativa”,
“Gracias maestros por enseñarnos a leer y
a escribir y ahora por enseñarnos a luchar”. UAM (Universidad Autónoma
Metropolitana), IPN (Instituto Politécnico Nacional), ESANS (Escuela Secundaria
a la Normal Superior de México), la Universidad de Chapingo y estudiantes
de distintos grados escolares de otras escuelas y trabajadores acompañaron
con sus mantas, sus consignas, y su música a esta protesta en defensa de los
derechos y en contra de las distintas reformas que se pretenden aprobar en
materias energética, fiscal pero principalmente la educativa, la laboral. Un
grupo de jaraneros formó parte de un contingente, artistas como CLETA fueron
realizando performances a lo largo del recorrido que duró más de dos horas no
por la distancia sino por la cantidad de gente.
Abundaban los curiosos o
quiénes de manera casual transitaban por esta avenida observando con gran
asombro. No faltaban las fotos con el celular, nadie ofendía ni se vivieron
momentos de agresión, se sintió la presencia de la unión, incluso la lluvia
hizo acto de presencia regalando algunas gotas sin mayor trascendencia. La fuerza
se sentía, los cantos y la alegría eran compartidos, una importante presencia
de jóvenes y adolescentes que mostraban su indignación y posición frente a la
situación del país y el de que no hay razones para festejar la Independencia en
un país que no toma en cuenta a su pueblo y atenta contra él mismo.
La bandera de la diversidad
sexual también estuvo presente al coro de “también
el maricón defiende la nación” posicionándose frente a los temas de interés
social. Se sumaron a la marcha un grupo de personas que portaban una manta en
defensa de la libertad del profesor Alberto Patishtán, siendo su hijo Héctor
uno de los que la sostenían. Fue un tema que se denunció y por el cual también
se sumó como parte de las exigencias durante la protesta.
Se llegó al punto de
término cerca de las 19:30 horas dando la vuelta en la glorieta del caballito
mientras el crepúsculo comenzaba a caer. La calle se volvía muy estrecha y con
los camiones, tiendas del plantón y tarimas se iba entrando en una especie de
laberinto que conducía a la plaza, una tarima y en la parte central de la plaza
el Monumento a la Revolución. El acto cultural había dado inicio y las
secciones magisteriales se reagrupaban, iban a sus áreas mientras el resto de
la gente comenzaba a tomar lugar ocupando la totalidad de un costado de la
plaza por completo. Una representación del Frente en Defensa de la Tierra
de Atenco también asistió en apoyo a la CNTE comunicando, a través de Ignacio
del Valle, su solidaridad con la lucha. Las secciones de Oaxaca y Veracruz
también tuvieron uso de la palabra. Los bailes iniciaron mientras más personas
llegaban para compartir el Otro
Grito de Independencia, la orquesta sinfónica de la sección 22 toco algunas
piezas y el ballet folclórico de la misma sección presentó danzas como la
Sandunga, Canción Mixteca y otras más sonaron en el monumento. Un toque que dio
otra mirada al evento fue que todo esto se vivió en la oscuridad, solamente el
escenario contaba con luz esto debido a que las autoridades cortaron la
electricidad en toda el área.
Héctor Patishtán en el Grito de Resistencia en el Monumento a la Revolución
(Video)
Minutos antes de que se
dieran las once de la noche comenzó a chispear, lo que habría sido causal de
pensar que se quedaría sin una importante presencia pero esto no fue así, la
gente se mantuvo en su sitio aún durante el grito, siendo uno de los momentos
en que la llovizna había aumentado. Se dio el grito no sin antes expresar las
exigencias no sólo contra la reforma educativa, sino al resto de las reformas,
la libertad de los presos políticos y más. Se hicieron honores a la bandera y
se entonó, al terminar el grito, el himno Venceremos.
El evento continúo ya que
el programa era largo y varios artistas se había solidarizado para asistir y
participar. Cierto es que el pueblo mostró su solidaridad con la CNTE, quiénes
iban lo hacían por su propia voluntad, decisión, compromiso, símbolo de
hartazgo y sobre todo por su nula creencia en que el gobierno está haciendo las
cosas para el pueblo. Las mofas a Enrique Peña nieto fueron constantes, el
rechazo fue más que evidente así como ese momento de acercamiento en el que los
ánimos se levantaron por la presencia de tantas personas mostrando su
convicción de que las cosas deben de ser diferentes y que es necesario que
cambien para el beneficio de toda la población en México. El eco de las
consignas que este 15 de septiembre se escucharon en el Monumento a la
Revolución quedarán grabadas para siempre en la memoria de los presentes y de
la historia que es la historia de la gente común que nace, vive, crece y muere
creyendo en que ese otro mundo es posible.
Maestra de la #CNTE en el monumento a la Revolución
Publicado el 15/09/2013
Maestros de la CNTE mantienen el plantón en el
monumento de la Revolución. Agradecen el apoyo brindado por los ciudadanos de
la capital del país ya que durante todo el día no han dejado de recibir apoyo
de víveres, ropa y medicamentos. (video)
Más información en: www.somoselmedio.org
Comentarios