Lunes 22 de julio: a las 10 de la mañana,
la maquinaria de la empresa Tradeco entra a la barranca, frente a la cual los
Frentes Unidos en Defensa de Tepoztlán mantienen un campamento de resistencia
contra las obras de ampliación de la autopista La Pera-Cuautla (kilómetro 15,9
de la carretera).
El pueblo logra detener la
maquinaria y pide que se abra una mesa de diálogo con la Secretaría de
Comunicaciones y Transportes, Capufe y Tradeco, para tener detalles sobre el
proyecto de ampliación.
Llega una representante
del gobierno estatal, Montserrat, quien declara que no está en su poder detener
las obras y que no quiere que nadie salga lastimado.
Lunes en la noche: tensa calma. Las
maquinas aguardan detrás de la barranca y el pueblo en su campamento.
Martes 23 de julio: temprano en la mañana,
llegan a la barranca más transportistas, camiones y trabajadores de Tradeco,
bajo el resguardo de decenas de granaderos el pueblo hace una valla humana
frente al campamento, mientras las maquinas empiezan a trabajar llega de nuevo
la representante del gobierno estatal, Montserrat..., a reiterar que no quiere
que nadie salga lastimado los granaderos rompen la valla humana, lastimando
mientras a por lo menos 4 personas, entre los cuales un menor de edad las
maquinas empiezan a trabajar en la loma donde se encuentra el campamento,
mientras el pueblo en resistencia permanece en el lugar. Dado que no pueden detener
las maquinarias, algunos de los integrantes de Los Frentes Unidos optan por
bloquear la carretera por intervalos.
Por temor a la
violencia, alrededor de las 15 horas, el pueblo decide replegarse e ir a
manifestar su inconformidad en el palacio municipal de Tepoztlán.
Ante los medios de
comunicación, el Presidente municipal de Tepoztlán, Francisco Navarrete,
declara que todavía no existe acuerdo para que empiecen las obras de ampliación
en los terrenos comunales y que por lo tanto, la empresa Tradeco debe parar el
trabajo. Asimismo, manifiesta contundentemente que no está detenido en contra
de su voluntad dentro del palacio municipal.
Navarrete declara que ha
mandado parar las obras. Una comisión de mujeres sale a la carretera para
verificar lo dicho, y efectivamente, las maquinas han parado de trabajar,
después de arrasar con toda la vegetación de la loma. Sin embargo, los obreros
y la maquinaria sigue en el lugar y la comisión se ve prohibir el paso al
campamento, que se encuentra resguardo por decenas de granaderos.
Unas horas más tarde,
Navarrete firma un acuerdo de trabajo donde se compromete como Presidente
Municipal de Tepoztlán a sumarse a la resistencia en contra de la ampliación de
la autopista. Asimismo, promete ir a inspeccionar las obras de construcción al
día siguiente y cita a la gente a las 8 de la mañana, delante del palacio
municipal.
Miércoles 24 de julio: a las 8 de la mañana,
unas decenas de granaderos llegan a resguardar el palacio municipal el pueblo
se reúne y espera que llegue el regidor de protección ambiental, Miguel David
Rodríguez Bello, para ir a inspeccionar las obras. En vano.
Los granaderos intentan
detener al mismo joven menor de edad que agredieron la víspera, cuando éste
salía del súper con unos cohetes.
En declaración a medios
de comunicación, Navarrete declara que firmó el acuerdo bajo presión y que fue
retenido contra su voluntad. Además declaró que está turnando averiguaciones
previas y demandas por robo y demás agravios.
Mientras, las máquinas
han retomado el trabajo y siguen arrasando con la vegetación.
Cabe mencionar que la Comisión
de Derechos Humanos del estado estuvo presente tanto en los hechos del 23 como
el 24.
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