por El Ventano
Lunes, 29 de julio de 2013
Las autoridades mexicanas han decidido no
facilitar información de los enfrentamientos entre agentes policiales y el
narcotráfico en la región de Tierra Caliente para evitar que se extienda el
pánico entre la población. Las emboscadas a la Policía se suceden y los muertos
en ambos bandos se cuentan por decenas, mientras los habitantes no se atreven a
salir de sus casas y la prensa no quiere meter las narices en el conflicto.
Desde principios de la pasada semana, la región
de Tierra Caliente es una zona de guerra sin cuartel donde el cártel de Los
Caballeros Templarios ha lanzado una ofensiva contra la Policía Federal, con el
resultado de decenas de muertos por ambos bandos.
El último comunicado de la Comisión Nacional de
Seguridad hablaba de "ataques
planeados con anticipación, en los que participaron individuos con armas largas
y machetes ocultos en los cerros, además del bloqueo de carreteras con
autobuses y otras unidades originando emboscadas a las unidades policiales".
Varios agentes han asegurado que se han
registrado numerosos atentados contra unidades de la Policía Federal, de los
que no se ha informado a los medios de comunicación, así como tampoco de las
bajas habidas entre sus compañeros. "La
Federal no informa de lo que está ocurriendo por evitar que se extienda el
pánico entre la población", afirmaron.
En un contexto de terror, los pueblos de
Tierra Caliente, en Michoacán, se debaten en una batalla entre la federación y
el crimen organizado, que trastoca la cotidianidad de sus habitantes, que se
encierran en sus casas sin atreverse a salir. Patrullas policiales recorren las
calles sabiendo que en cualquier momento se pueden encontrar con una emboscada
de Los Caballeros Templarios.
Comentarios