Mi nombre es Roberto Oliveros
Cuervo, de profesión docente. En el año del 2004 se inició en mi contra un
proceso judicial por la participación en una toma a la cafetería central de la
Universidad del Valle, actividad que se realizó por mayor cobertura de subsidios
y apoyada por los estudiantes en el marco de un conflicto por mejoras
presupuestales para la universidad.
La
administración de la Universidad inmediatamente me acusó “de constreñimiento ilegal” y se inició un proceso que hoy 1 de
mayo de 2013 me tiene en la cárcel, pues se me dicta sentencia de doce meses de
prisión.
La razón de mi
actual detención es política, es la obra siniestra de una administración
universitaria que quiere cobrar venganza por una lucha abierta y directa que
ofrecieron los estudiantes en esa época.
Hoy me encuentro
recluido, luego de haber soportado años enteros de persecución política en la
universidad, lo que obliga a retirarme en enero del presente año. Prueba de
ello es la negativa de la universidad a apoyar la presentación de dos ponencias
académicas que fueron seleccionadas para ser socializadas internacionalmente,
una en Chile y la otra en Venezuela.
A pesar de ser
un estudiante activo del plan de licenciatura en Educación Básica con énfasis
en Ciencias Sociales, no se me prestó el apoyo logístico y por el contario se
siguió insistiendo en el proceso judicial hasta que lograron por ahora su
cometido.
¿Quieren acaso
los ingenuos que sienta vergüenza por haber luchado por l que consideré y
considero justo? Se equivocan si pretenden doblegar una decisión que con el
paso del tiempo se hace más clara y contundente.
EXIGIMOS
JUSTICIA FRENTE A ESTE ATROPELLO
POR FAVOR
DIFUNDIR ESTE MENSAJE A TODOS TUS CONTACTOS
(Carta realizada por Roberto Oliveros
docente de Univalle desde la prisión)
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